Qué se puede hacer por el medio ambiente

Aunque las palabras “ecología” “medio ambiente” “conservación” y, en los últimos años “biodiversidad” han dejado de ser desconocidas para la mayor parte de la población, su significado y estado actual no han alcanzado la misma difusión.

La protección del medio ambiente implica a múltiples disciplinas, y es necesario actuar en todos los niveles, de una manera transversal. Para empezar, no se puede generar una verdadera “conciencia ecológica” sin hacer llegar al ciudadano los conocimientos necesarios acerca del medio natural, los productos que consumen, su huella ecológica, etc.

Tanto los medios de comunicación y difusión científica, así como la educación de las nuevas generaciones en esta corriente de pensamiento son muy necesarias para implicar realmente a la población en una labor que requiere la cooperación a nivel global. Otro de los pilares de la protección del medio ambiente es un mayor compromiso entre la investigación científica y su aplicación a la gestión medioambiental real, en manos de administraciones públicas. Muchos de los estudios en biología de conservación que se realizan, y en los que se proponen soluciones prácticas de gestión de áreas o especies en peligro, chocan con otros intereses de índole económica, logística, o cualquier otra interferencia con el estilo de vida actual. Es necesario por lo tanto, unificar unos criterios mínimos que den salida útil a la inversión que se realiza en estudios de conservación.

Por último, y no por ello menos importante, está el papel fundamental del ciudadano. Para que una persona normal, sin un alto nivel de compromiso con el medio ambiente, empiece a desarrollar un comportamiento verdaderamente respetuoso y preocupado por el mismo son necesarios los dos pasos anteriores: debe ser debidamente informada de sus opciones y del estado de las cosas, así como observar un compromiso por parte de sus representantes. En este sentido hay una gran cantidad de cosas que un ciudadano bien informado puede hacer: desde el consumo de productos respetuosos con el medio en su origen y tratamiento, hasta el reciclaje de residuos, pasando por el uso de transportes limpios, energías renovables, y por supuesto, apoyo al trabajo de concienciación que es tarea de todos los que deseamos un mejor futuro para el planeta.